Pechuga de pollo con champiñones y salsa de mostaza y curry

En casa nos gusta el pollo, tanto que creo que mi marido se conformaría con comer pollo asado a diario. Menos mal que yo no me conformo y siempre estoy buscando nuevas recetas con las que sorprenderle.

Estas pechugas las vi en el blog de Suny, Olivas en la cocina y desde un primer momento supe que me encantarían.

Sigo a Suny desde hace algún tiempo y me encanta su cocina, las recetas que prepara, tanto dulces como saladas, los estilismos que usa y las fotografías con las que ilustra su blog, me confieso una fan incondicional. Estas pechugas no nos han defraudado y las recomiendo una y mil veces, el toque de especias en la salsa sorprende.

Cortamos las pechugas en tres filetes gruesos. Las salpimentamos y las espolvoreamos con una pizca de harina. En una sartén amplia, ponemos un chorrito de aceite de oliva y doramos las pechugas con el aceite bien caliente para que no se pasen. Las dejamos sobre un papel para que se elimine el exceso de aceite.

En la misma sartén pochamos la cebolla finamente cortada y le añadimos una pizca de sal. En cuanto la cebolla comience a dorarse le añadimos los champiñones laminados y lo rehogamos todo junto hasta que los champiñones se ablanden. Incorporamos una cucharadita de mostaza antigua, media cucharadita de curry y una cucharada de harina y sofreímos con cuidado de no quemar las especias (la harina es para darle espesor a la salsa, yo creo que la próxima vez no se la añadiré ya que la salsa me quedó muy espesa)

Añadimos el oporto y lo dejamos reducir para que evapore el alcohol. A continuación incorporamos la leche evaporada y removemos bien para que todos los sabores se mezclen. Finalmente unimos las pechugas a la salsa y lo dejamos cocer todo a fuego medio durante un par de minutos.

Para acompañar este plato he usado un poco de arroz basmati que he aromatizado con anís estrellado. Una combinación perfecta. Espero que os guste.