Fresas leche y leche

Mañana se celebra San Valentín, en mi casa hay doble celebración y no precisamente por el día de los enamorados (esto se debería celebrar a diario) sino porque es el cumpleaños de mi hermana pequeña, Zeneida y el santo de mi padre que, como ya os imagináis, se llama Valentín. 

Ando super liada preparando un menú especial para el 30 cumpleaños de mi hermana por lo que no he tenido tiempo de preparar nada acorde con esta fecha tan señalada. Qué hay más romántico que unas fresas bañadas en chocolate y regadas con un buen champán? Pues unas fresas con leche y leche condensada, vamos un leche y leche de toda la vida.

Este es un postre que tomamos en casa de siempre y por el que todas nos volvemos locas sin excepción, una cosa tan sencilla de preparar y tan deliciosa. He de reconocer que cuando era pequeña no me atraían mucho las fresas pero corría a la nevera a beberme toda la leche que podía sin que mi madre se diera cuenta, es un manjar, ese toque dulce mezclado con el sabor de las fresas es mejor que cualquier refresco.

Para hacer esta receta hice por primera vez mi propia leche condensada, no sabéis lo sencillo que es. Creo que he abierto la caja de Pandora porque ahora no habrá quien me pare a la hora de hacer flanes o bizcochos con leche condensada o simplemente para prepararme un típico "leche y leche", ese cortado endulzado con leche condensada. La receta la saqué del blog de Food and cook y aquí os dejo la receta.

 El procedimiento es muy sencillo, simplemente unimos todos los ingredientes en un cazo y lo dejamos cocer a fuego lento hasta conseguir la textura que deseamos. Debemos de tener cuidado para que no se nos pegue por lo que lo mejor es cocerlo a fuego lento removiendo de vez en cuando. Hay que tener en cuenta que cuando se enfría la leche condensada espesa por lo que la retiraremos del fuego cuando aún esté líquida.

Para hacer las fresas leche y leche ya sólo nos hacen falta las fresas y la leche entera. Un postre más sencillo que éste es imposible, ya lo veréis.

Simplemente unimos la leche y la leche condensada en un bol y lo batimos bien hasta que se mezclen. Le incorporamos las fresas troceadas y lo llevamos a la nevera para que se enfríe.

No me diréis que no es sencillo. Si os pasa como a mí y os ha pillado el toro para mañana os recomiendo este delicioso postre, seguro que os recompensan con miles de besos. Yo desde aquí ya os mando uno.