Tarta de frutos rojos y mascarpone

En cuanto vi esta tarta en el blog de Megasilvita supe que iba a triunfar en casa y no me equivoqué. No seguí la receta al pie de la letra ya que no tenía tiempo y me decidí por hacer el bizcocho en el microondas y fue todo un acierto. Cuando tienes poco tiempo es la solución perfecta así que ahí van los ingredientes que vamos a necesitar:

Comenzamos preparando el bizcocho y para ello batimos los huevos con el yogur y el azúcar. Incorporamos la harina y la levadura tamizados y seguimos batiendo hasta que se integren los ingredientes. Por último añadimos el aceite y el extracto de vainilla y removemos.

Engrasamos un molde apto para el microondas (yo uso uno de Lekue con la base de cerámica y las paredes de silicona) y vertemos la masa (no llenar el molde más de 3/4 partes). Lo metemos en el microondas a 800W unos 7 minutos y medio, dejamos reposar un minuto más antes de abrir el microondas y comprobar que el bizcocho esté hecho (si vemos que el centro aún está crudo lo cocinaremos medio minuto más hasta que se haga, cuidado con pasarnos de tiempo que se endurece fácilmente)

Una vez hecho lo desmoldamos sobre una rejilla y dejamos que se enfríe completamente. Mientras se enfría vamos a preparar la mermelada de frutos rojos y para ello ponemos los frutos rojos (yo usé de los congelados), el agua, el azúcar, el almidón de maíz y el sirope de maíz en un cazo a fuego medio removiendo de vez en cuando hasta que todos los ingredientes se mezclen y consigamos una especie de mermelada espesa. Retiramos del fuego y dejamos que enfríe completamente.

Para preparar la crema de mascarpone ponemos en el bol de la batidora el queso mascarpone con la nata, el azúcar y la vainilla y batimos un par de minutos hasta que los ingredientes se integren y tengamos una crema suave en la que no se note el granulado del azúcar. Pasamos la crema a una manga pastelera con boquilla redonda y dejamos en la nevera hasta el momento de montar la tarta.

Para montar la tarta cortamos el bizcocho en tres partes iguales. Sobre la primera capa de bizcocho ponemos un reborde de crema de mascaropne por el filo para que no se nos escape la mermelada que pondremos en el centro. Extendemos y cubrimos con un  poco más de crema. Repetimos el mismo proceso en la capa de en medio (reborde de crema, mermelada en el centro y cubrimos con un poco más de crema)

Para la última capa en vez de el reborde continuo de crema he hecho uno más decorativo con una fila doble de bolitas de crema, he puesto la mermelada en el centro y he colocado unas cuantas frambuesas frescas en el centro. Ya tenemos la tarta terminada. ¿Que les parece? A que queda muy vistosa, pues no les digo nada del sabor, está para chuparse los dedos.