Chocolate velvet

Me apasiona el chocolate y en cuanto vi esta tarta en Pinterest me puse manos a la obra. Para preparar esta pecaminosa delicia vamos a necesitar:

Comenzamos batiendo la mantequilla, que ha de estar a temperatura ambiente, junto con el azúcar hasta conseguir una masa esponjosa. Añadimos un huevo y continuamos batiendo hasta incorporarlo antes de añadir el otro. En otro bol tamizaremos la harina con el cacao puro y y la media cucharadita de café en polvo.

Si no hemos conseguido buttermilk podemos prepararlo añadiéndole a la leche un chorrito de limón, removemos y dejamos reposar 10 minutos. Mientras incorporamos un tercio de la mezcla de ingredientes secos y tamizados a la mezcla de mantequilla, azúcar y huevos. Batimos y añadimos la mitad de la buttermilk. 

Incorporamos otro tercio de la mezcla de ingredientes secos y cuando esté integrado añadimos el resto de la buttermilk y la cucharadita de extracto de vainilla y finalizamos con lo que nos queda de ingredientes secos. Finalmente incorporamos el bicarbonato y el vinagre y batimos a baja velocidad para no sobrebatir. Lo pasamos a un molde forrado con papel de hornear y lo horneamos en el horno precalentado a 175º durante unos 50 minutos (o hasta que pinchemos con un palillo y éste salga limpio)

Una vez esté el bizcocho cocinado lo sacamos del horno y lo dejamos atemperar 10 minutos antes de desmoldarlo sobre una rejilla para que se enfríe completamente. Cortamos el bizcocho por la mitad y lo rellenamos con una deliciosa mousse de chocolate (aquí tienes la receta) Decoramos con chocolate blanco rallado. Esta tarta está mejor dos días después de haberla preparado y tenerla bien refrigerada.